Cuando decidimos comprar un nuevo colchón para nuestra cama dedicamos un tiempo a informarnos de diferentes opciones, prestaciones y precios. Entendemos que es una compra importante y que tiene que tener un mínimo de calidad para que nos proporcione un buen descanso. Lo entendemos como una inversión en nuestra salud, ya que pasamos muchas horas de nuestra vida durmiendo.
Pero… ¿y tu perro? ¿has pensado que su descanso es también importantísimo para su calidad de vida?
La importancia del colchón o cama para tu perro
Un perro adulto sano duerme de 12 a 14 horas diarias. Cuando es cachorro puede necesitar hasta 18 horas de sueño. Y un perro senior necesita descansar más de 15 horas.
Un sueño reparador es clave para reponer energía, favorecer un buen sistema inmunológico y proteger el corazón, entre otros beneficios.
Hay perros que por su edad o por circunstancias de salud necesitan pasar muchas horas tumbados aunque no estén durmiendo: por ejemplo cuando se tienen que recuperar de una cirugía, o cuando por artrosis o displasias les cuesta mantenerse mucho tiempo de pie.
Por todo ello es importante para nuestro perro tener una buena base de descanso que le permita regenerarse, evitar el estrés, gozar de buen humor y mantener o recuperar un buen estado de salud.
¿Cómo elegir la mejor cama para mi perro?
Hay muchas camas y colchones para perros en el mercado, y merece la pena dedicar un tiempo a conocer las diferentes opciones para decidir cuál es la que más conviene a tu mascota.
En función de su tamaño, peso, edad y forma de dormir podrás decidirte entre una u otra. Pero no te engañes: una cama súper barata seguramente no tendrá la calidad ni las prestaciones deseables para el buen descanso de tu perro.
Razones para invertir en un buen colchón o cama para perros
Fíjate que decimos “invertir”, lo cual supone gastar más pero con la seguridad de que a la larga nos va a suponer un beneficio. O mejor dicho, muchos beneficios:
Comodidad
Para que un perro descanse bien, tiene que sentirse cómodo. Obvio, ¿verdad?
Una cama o colchón excesivamente blando o mullido nos puede parecer a simple vista que es cómodo, pero… ¿te imaginas a tí mismo durmiendo semihundido en un cojín enorme? ¿crees que te sentirías cómodo? Ponte en el lugar de tu perro.
Lo ideal es una base con la firmeza justa, ni blanda ni dura, que le permita posicionar bien su cuerpo y sus articulaciones y evite malas posturas.
Seguridad
Tener su propia cama proporciona al perro seguridad. Es su territorio, su refugio, su zona exclusiva de descanso que le da tranquilidad. Aunque a veces duerma contigo o le permitamos subir al sofá, es bueno que tenga un colchón que reconozca como suyo. Si viajas con él y llevas su cama, le ayudará a sentirse como en casa.
Es bueno que tenga una cama de calidad, resistente pero agradable, que no se deforme y fácil de transportar.
Cuidado de los huesos y articulaciones
Independientemente de si a tu perro le gusta más dormir estirado o un poco más encogido, una excelente opción es un colchón con base viscoelástica con “efecto memoria” que se adapte a su cuerpo y evite presiones. Si tu perro es jóven le estarás ayudando a prevenir muchas dolencias de huesos derivadas de malas posturas. Y si tienes un perro senior con alguna enfermedad ósea diagnosticada, supondrá un gran alivio y le ayudará a descansar mucho mejor.
En perros con artrosis, artritis o displasias es la opción más recomendada por profesionales veterinarios por sus buenos resultados.
Ácaros y bacterias
Si el interior de un colchón o cama para perros es importante, no lo es menos la parte exterior con la que el animal va a tener contacto.
Hay camas con fundas de materiales baratos y sintéticos que se convierten en nidos de ácaros y bacterias y favorecen las alergias y la suciedad, cosa nada recomendable ni para el animal ni para su familia.
Otras están hechas de materiales plásticos que presumen de ser impermeables pero nada agradables al tacto… ¿te imaginas a tí mismo durmiendo sobre un plástico?… Pues eso.
Limpieza y olores
Pues sí, aunque adoremos a nuestros peludos la verdad es que van dejando rastro de olores y pelos por toda la casa y especialmente en su cama donde pasan mucho tiempo.
Por eso, es fundamental que la funda de su cama sea de un tejido agradable al tacto pero a la vez de fácil mantenimiento, lavable y en el que los pelos no se enganchen. Si además tiene tratamiento anti olores habremos encontrado la cama perfecta para nuestra mascota.
Materiales aislantes
Otra de las cosas que hay que tener en cuenta al elegir una cama para nuestro perro es la temperatura. Una cama de mala calidad puede estar hecha con tejidos sintéticos que le den mucho calor en verano o no le aíslen lo suficiente del frío o la humedad en los meses de invierno. En los colchones menos baratos pero de alta calidad se suelen utilizar tejidos termorreguladores que se adaptan a la temperatura del cuerpo en cualquier época del año. Un plus de comodidad para nuestro perro que hará que su descanso sea de la mejor calidad.
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Hazle caso al refrán: lo barato, sale caro
Como hemos visto, comprar cualquier cama o colchoneta barata no es lo mejor para la salud y el bienestar de nuestro perro. Y aunque parezca paradójico, tampoco para nuestro bolsillo.
Una cama barata y de baja calidad se deforma con facilidad y coge olores difíciles de eliminar. Además puede que al lavarla no acaben de salir las manchas del todo, destiña o se encoja fácilmente. Eso hará que acabemos comprando varias camas al año y al final nos gastemos más que si compramos un único colchón de calidad.
Ahora ya sabes por qué comprar una cama o colchón barato no es la mejor opción para tu perro.
Piensa a medio y largo plazo y ofrécele a tu mascota una buena base para su descanso. Vivirá más sano y feliz y tendrá dulces sueños.
