¿Te acuerdas del calor que pasamos el verano pasado? Pues este que está a punto de llegar se avecina según todos los indicadores igual… o incluso peor. Y si nosotros lo sufrimos, nuestros perros todavía mucho más.
Y es que, a diferencia de los humanos, los perros no pueden regular su temperatura corporal de manera tan eficiente, lo que los hace más susceptibles a los efectos negativos del calor extremo.
El calor puede tener un impacto significativo en la salud y el bienestar de los perros, por eso es importante tomar medidas para protegerlos durante los meses más calurosos del año.
EL CALOR EXTREMO, UN PELIGRO REAL PARA TU PERRO
Toma nota de los peligros que acechan a tu mascota debido al extremo calor:
Deshidratación
Una de las principales preocupaciones cuando se trata del calor y los perros es la deshidratación. Los perros pueden deshidratarse rápidamente en climas cálidos, especialmente si no tienen acceso constante a agua fresca y limpia.
La deshidratación puede causar síntomas como letargo, sequedad de las encías, disminución del apetito y orina concentrada y oscura. En casos graves, puede provocar daño renal e incluso poner en peligro la vida del perro.
Por lo tanto, es fundamental asegurarse de que los perros siempre tengan acceso a agua fresca y mantenerla disponible tanto en interiores como en exteriores.
Golpe de calor
El calor excesivo puede llevar a un agotamiento por calor en los perros.
El agotamiento por calor, también conocido como golpe de calor, es una afección grave que ocurre cuando la temperatura corporal del perro se eleva a niveles peligrosos. Esto puede ocurrir cuando un perro está expuesto a altas temperaturas durante períodos prolongados o si realiza ejercicio intenso en un clima cálido.
Los síntomas de un golpe de calor incluyen jadeo excesivo, letargo, debilidad, vómitos, diarrea, colapso e incluso convulsiones.
Un golpe de calor es una emergencia médica y requiere atención veterinaria inmediata.
Para prevenir el agotamiento por calor, es esencial evitar el ejercicio intenso durante las horas más calurosas del día y proporcionar a los perros un lugar fresco y sombreado para descansar.
Quemaduras en las almohadillas
Otro problema común relacionado con el calor en los perros es la quema de las almohadillas de las patas.
Las superficies calientes, como el pavimento, el asfalto o la arena, pueden alcanzar temperaturas muy altas y quemar las sensibles almohadillas de las patas de un perro.
Esto puede causar dolor, irritación y, en casos graves, ampollas o heridas abiertas.
Para proteger las almohadillas de los perros, es recomendable evitar caminar sobre superficies calientes durante las horas pico de calor. Si no puedes evitarlo, puedes proteger las almohadillas aplicando una crema protectora o utilizando botitas especiales para perros.
Estrés por calor
Los perros son más susceptibles al estrés por calor debido a su incapacidad para regular su temperatura corporal de manera eficiente. Se puede manifestar a través de síntomas como respiración agitada, inquietud, lengua colgante y falta de energía. En casos graves, puede provocar convulsiones o pérdida de conciencia.
Ojo con el coche
Nunca debes dejar a tu perro en un automóvil estacionado en un día caluroso, incluso con las ventanas entreabiertas. Los automóviles se calientan rápidamente y pueden convertirse en trampas mortales para los perros.
Incluso en un corto período de tiempo, la temperatura dentro de un automóvil puede aumentar drásticamente y poner en peligro la vida del perro.
Si necesitas dejar a tu perro por algún motivo, es mejor dejarlo en casa en un lugar fresco y seguro.
Ejercicio sí… pero controlado
Es importante ajustar la rutina de ejercicio de los perros durante los días calurosos.
Realizar actividades extenuantes al aire libre, como correr o jugar enérgicamente, puede aumentar rápidamente la temperatura corporal de un perro y ponerlo en riesgo de agotamiento por calor.
Es preferible optar por caminatas temprano en la mañana o tarde en la noche, cuando las temperaturas son más frescas. También es esencial llevar agua y permitir que el perro descanse a intervalos regulares durante el ejercicio para evitar el sobrecalentamiento.
A muchos perros les encanta el agua. Aunque todavía son insuficientes, cada vez hay más playas, lagos, embalses o piscinas habilitados para perros. Así que si tienes la oportunidad de llevar a tu mascota de vez en cuando, es una excelente y divertida manera de quitarse el calor de encima.
Por cierto, si te lo perdiste, te dejamos aquí un artículo sobre perros y el deporte.
¿Y EN CASA?
Los días de calor extremo, lo normal es que tanto nosotros como nuestro perro pasemos más tiempo en casa que en el exterior.
Es importante proporcionar a las mascotas un lugar fresco y sombreado y usar ventiladores o aire acondicionado si disponemos de él. Las alfombras de enfriamiento para ayudarle a mantenerse fresco y cómodo son también una buena alternativa. Y por supuesto, como ya hemos indicado, asegurarnos de que siempre disponen de agua fresca y limpia a su alcance.
El descanso, muy importante también en verano
Es normal que los perros busquen el frescor del suelo en los días más calurosos. Aún así, es ideal que dispongan de una buena cama que haga su descanso más placentero y reparador.
Las camas y colchones Baluka, con interior de viscoelástica, están elaboradas con un material termorregulador: no les da ni frío ni calor, sino que se adapta a la temperatura del cuerpo del animal proporcionando máximo confort.
Recordemos que nuestros amigos peludos dependen de nosotros para cuidar de ellos, y protegerlos del calor es una parte vital de esa responsabilidad.
Nuestras camas de viscoelástica balukaDREAM son ideales para todo el año puesto que no dan especialmente calor en verano, aunque durante los días de intenso calor, será inevitable que busquen el suelo. ¿No lo harías tú también? 😁
¡Disfrutad del verano!