Convivir con mascotas es beneficioso para todas las personas, pero para los niños de forma especial. Los niños que conviven con perros desde su más tierna infancia asimilan valores muy positivos:
- Desarrollan una conducta más responsable. Entienden que el perro requiere de cuidados y atención. En función de su edad pueden asumir diferentes tareas relacionadas con el cuidado del animal: encargarse de que tenga agua limpia, darles de comer, cepillarlos, sacarlos a pasear y jugar con ellos.
- Aprenden a amar y respetar a los animales. Al percibir que el perro responde a ese afecto y cuidados de forma positiva se sientan las bases del respeto por los animales y la naturaleza.
- Aumentan su desarrollo social y emocional. Los niños que conviven con animales de compañía sienten mayor compasión y empatía, fomentan la alegría y aprenden a superar muchos miedos habituales en la infancia. Al abrazar a su perro encuentran apoyo y alivio en situaciones de temor o tristeza.
Hay algunas razas de perro especialmente adecuadas para convivir con niños, a los que les encanta jugar con ellos, los protegen y cuidan y se dejan hacer las mil y una “perrerías” sin una mueca de desagrado.
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Labrador Retriever o Golden Retriever
Dos razas excelentes para convivir con niños. A pesar de tener un tamaño considerable, son muy amorosos y pacíficos. Pero eso sí, necesitan correr y gastar energía, así que la familia tiene que estar dispuesta a sacarlo a correr y pasear.
Merece especial mención su idoneidad como perros de asistencia o terapia para personas mayores o niños con discapacidades visuales, físicas o autismo.
Border Collie
Inteligente, equilibrado y muy fiel. Le encanta correr ya que tienen una gran cantidad de energía para gastar. Es súper familiar y protector de los niños y de la casa. Está considerado como el perro más inteligente. Detesta la soledad, así que no hay que dejarlos mucho tiempo sin compañía si queremos evitar conductas destructivas.
Beagle
Es una de las razas más conocidas del mundo, y también de las más antiguas. Adora a todos los miembros de su familia humana, y de forma especial a los niños con los que disfruta explorando y jugando. Muy cariñosos y amables, pueden ser la compañía ideal de los pequeños de la casa a los que protegerá y amará incondicionalmente.
Boxer
Este perro es especialmente indicado para vivir en familia, ya que es cariñoso, obediente, fiel y equilibrado. Es una raza que se utiliza mucho para terapias para personas con discapacidad o tratamientos de niños o ancianos enfermos. Trata a los niños de forma excelente si se les socializa desde la etapa de cachorro. Eso sí, es un perro enérgico que necesita salir y tener actividad física regular.
Pastor alemán
Extraordinariamente inteligente y leal, pueden ser entrenados como perros de asistencia y guardianes, y son extremadamente protectores con su familia y especialmente con los niños. Seguro que habrás visto algún video de pastores alemanes ayudando o protegiendo a niños en peligro (ahogamientos en piscinas, intrusos en el hogar o niños en riesgo de ser atacados)
Perros mestizos
La experiencia que supone para un niño tener un perro será doblemente positiva si además su mascota ha sido rescatada de algún refugio o protectora. Pero debes asegurarte de que el can elegido no ha pasado por situaciones difíciles que puedan provocarle problemas de conducta que pongan en peligro a los niños. Proporcionar un hogar y dar una segunda oportunidad a un animal se verá recompensado con su eterno agradecimiento, amor y fidelidad. Y ese es un aprendizaje impagable para cualquier niño.
Estas son algunas de las razas ideales para convivir con niños, pero no las únicas: Caniche, San Bernardo, Bichón Maltés, Bulldog Francés, Yorkshire Terrier, Cocker, Carlino…
Pero la raza no lo es todo. Cualquier perro bien educado, adiestrado y que reciba una buena dosis de amor será el compañero ideal para toda la familia, y por supuesto para los niños.
Si durante tu infancia conviviste con un perro ya conoces todos los aspectos positivos de tener mascota. Pero si no tuviste esa suerte, plantéate ofrecerles a tus hijos esa oportunidad: te lo agradecerán toda la vida.
